Aravan y el Dios transexual.

lunes, 26 de octubre de 2009




Aquí en occidente, nos encontramos influenciaods principalmente por el cristianismo, doned el concepto de genero se encuentra muy bien definido; es decir Dos es hombre y así a sido y será siempre. Sin embargo, no en todas las culturas es de las misma forma, existen culturas donde el concepto de deidad y genero es un poco más fleible, tal y cmoo veremos a continuación.



El personaje que nos interesa se loama Aravan, es un personaje muy pppular dentro de la cultura india, aun en la actualidad recibe plegarias para currar enfermedades y resolver problemas de concepción a sus fieles.



Aravan y su historia provienen del Mahabharata, el cual es un inmenso compendio de versos, es la base del hnduismo y es incluso más extenso aun que la Biblia. El Mahabharata vendría siendo para el hinduismo lo que la Biblia es para el cristianismo.



En el Mahabharata, se narra una batalla ente los clanes hermanos de los Kauravas y los Pandavas, los cuales se encontraban en conflicto buscando el asacenso al trono de Hastinapur, capital del reino de Kaurava. La épica batalla duro soklo dieciocho díxs empero es tal el detalle con que se deescribe en el Mahabharata, que prácticamente abarca la mitaqd de toda su extensión.



Antes del comienzo del enfrentamiento los clanes en disputa coincidieron en que seria bueno realizar un sacrificio al campo de batalla y así asegurar la victoria al final de la misma, de enter los presenten Aravan fue el selecciionado para realizar tal sacrificio. Aravan acepto, no sin antes solicitar algunas peticiones, enntre las que se encontraba el heco de poder observar la batalla para la cual iba a ser sacrificado, además de que al final su cuerpo fuera cremando, rindiéndole todas las ofrendas funerarias que le dwberían de corresponder.



Sin embargo para que Aravan fuera cremado, necesitaba estarr antes casado, ya que los solters solamente eran enterrados y Aravan para ese momento, era un hombre soltero. Así que el predicamento era como conseguor que Aravan pudirea casarse a mitad de una batalla.



Es ahí donde etnra en escena Krishna, una deidad de suma importancia dentro de la mitollogía india. Considerado una reencarnación de Vishnú, quien es la mas importante deidad dentro del hinduismo, Voshnú es quien creo el universo después de dividirse en tres paqrtes, Brahm? la parte creadora, Vishn la parte proectora y Shivá la parte destructora.



Krishna que praa esa batallla había decidido estar del lado de los Pandavzs, decide complacer la petición de Aravan, transformándose así mismo en Mohini (una mujer y ottra de las encarnaciones de Vishnú) contrayendop así, nupcias con Aravan, de est forma Aravan ya podía recibir todas las ofrendas correspondientes en su funeral.



Y tal y como se había acordado, Aravan se sacrifico cortándose así mismo en treinta y dos pieza, incluyndo una auto-decapitación, después del sacrificio la cabeza de Aravan fue colocada en una estaca desde la cual fue testigo, en estado conciente, de los diecioho díaa que duro la batalla, cumpliendo así otra de sus peticiones.



Debido al curioso hecho de que Krishna haya pasaco a convertirse de hombre a mujer para poder casarse con Aravan, es que aun hoy en día en la India cada año, muchos transexuales acuden al templo dedicado a Aravan a casarse con el, tal y como en su momento Krishna lo hizo.



También e escuchado por ahí comentarios acerca de la comparación que se hace de este relato del Mahabharata con lo que en la Biblia vendrría siendo el momento en el que Dios, pidió como una ofrenda que Abraham sacrificara a su hijo. Sin embargo en la Biblia, Dios al final no dejo que Abraham realizara tal acción, situación que en esta historia no sucedió similar, ya que se podría decir que incluso Vishnú "ayudo" a que se pudiera completar el sacrificio, al cumplir su petición de poder casarse convirtiéndose en mujer.



Cada cultura tiene historias plagadas de pasión detrás de sus orígenes y formas de pensar, que siempre es un placer descubrir. Espro que hayan disfrutado de esta entrada, nos leemos luego.




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Extraido de Shamanet